El ransomware es una de las amenazas digitales más graves de los últimos años. Su impacto se multiplica debido a la facilidad con la que puede propagarse y al daño que genera en las organizaciones, sin importar su tamaño o industria.
Este tipo de ataque secuestra información. Cifra archivos o sistemas críticos, y exige un pago —generalmente en criptomonedas— para liberar el acceso. Además del daño técnico, la empresa afectada suele enfrentar pérdidas económicas, afectación reputacional y pérdida de confianza de clientes y aliados.
Según el Ransomware Report 2025 de Cybersecurity Ventures, en 2031 se estima que ocurrirá un ataque cada 2 segundos. En 2021, la frecuencia era de uno cada 11 segundos.
El costo promedio por incidente supera los 5 millones de dólares, considerando el rescate, la interrupción operativa y los daños a la reputación. Prevenir este tipo de ataque es hoy una prioridad estratégica.
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¿Cómo funciona un ataque de ransomware?
El ransomware es un tipo de malware que impide el acceso a datos o sistemas hasta que la víctima pague un rescate. Su funcionamiento es sencillo, pero muy efectivo:
- Se infiltra a través de correos de phishing, vulnerabilidades de software o accesos inseguros.
- Cifra archivos sensibles sin que el usuario lo note.
- Muestra una notificación que exige el pago para recuperar la información.
Una vez instalado, el tiempo para reaccionar es mínimo. El ataque puede paralizar operaciones por completo.
Principales vías de entrada del ransomware
- Correos de phishing con enlaces o archivos adjuntos maliciosos.
- Sistemas desactualizados con fallas de seguridad no corregidas.
- Contraseñas débiles o reutilizadas, que permiten accesos no autorizados.
- Acceso remoto sin protección en redes empresariales.
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Autenticación multifactor: clave para bloquear accesos indebidos
Una de las prácticas más eficaces para prevenir ataques de ransomware es la autenticación multifactor (MFA). Este sistema exige al usuario más de una prueba de identidad para acceder a una cuenta o sistema.
Incluye elementos como:
- Algo que sabes: contraseña o PIN.
- Algo que tienes: token físico o app en el móvil.
- Algo que eres: huella digital o reconocimiento facial.
MFA añade una capa extra de seguridad que puede bloquear el ataque, incluso si un atacante ya tiene la contraseña.
Segpass de Ionix: seguridad avanzada para empresas
Segpass es una solución de autenticación desarrollada por Ionix. Está pensada para proteger plataformas digitales empresariales con un enfoque práctico y seguro.
Principales beneficios de Segpass:
- Integración sencilla y rápida con sistemas existentes.
- Compatibilidad con estándares internacionales como ISO 27001 y GDPR.
- Capacidad de personalizar el nivel de control y acceso por usuario.
Su arquitectura permite implementar MFA de forma ágil, sin afectar la experiencia del usuario.
Prácticas adicionales para protegerse del ransomware
Además de soluciones como MFA y herramientas como Segpass, hay una serie de prácticas que toda organización debe adoptar para blindarse contra este tipo de amenazas.
Recomendaciones esenciales:
- Actualizar software y sistemas operativos constantemente.
- Hacer backups regulares, tanto en la nube como en dispositivos desconectados.
- Capacitar a los equipos sobre phishing y otras técnicas de ingeniería social.
- Aplicar el principio de mínimo privilegio, limitando accesos solo a quienes lo necesitan.
- Auditar accesos y registros de actividad para detectar anomalías.
Estas acciones forman una estrategia de defensa en capas, esencial para reducir riesgos.
Inversión en ciberseguridad: retorno real y tangible
Proteger una organización de ataques de ransomware no solo evita pérdidas, también tiene un retorno directo y cuantificable.
¿Dónde se ve ese retorno?
- Menor tiempo de inactividad gracias a backups automatizados.
- Reducción de rescates pagados.
- Mayor posibilidad de acceder a licitaciones, al cumplir con estándares de seguridad.
- Protección de activos intangibles como la reputación, propiedad intelectual o cartera de clientes.
- Ventaja competitiva, al demostrar compromiso con la seguridad ante socios y clientes.
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Evolución del ransomware: tendencias que marcan el futuro
El ransomware no se detiene. Los atacantes adoptan nuevas estrategias para maximizar el daño y la presión sobre las víctimas.
Principales tendencias actuales:
- Ransomware-as-a-Service (RaaS): kits listos para usar vendidos en la dark web.
- Ataques a la cadena de suministro: entran por software o proveedores comprometidos.
- Doble extorsión: primero roban datos y luego los cifran; si no se paga, amenazan con publicarlos.
- Uso de IA y machine learning para mejorar la eficacia de los ataques.
También evolucionan las defensas:
- Zero Trust, un modelo que no da por confiable ningún dispositivo o usuario.
- Protección basada en inteligencia artificial, que detecta patrones antes de que ocurra el ataque.
Cómo prepararse ante el ransomware hoy
Protegerse del ransomware no es solo una decisión técnica, es una estrategia empresarial. Invertir en soluciones como Segpass y en prácticas sólidas de ciberseguridad es una medida necesaria para cualquier organización que quiera operar con continuidad y confianza en el entorno digital actual.
Con ataques cada vez más frecuentes, más agresivos y mejor dirigidos, estar un paso adelante es la única opción viable. Prepararse no es opcional: es una inversión para garantizar la resiliencia, la confianza y la estabilidad futura. ¿Quieres saber cómo Segpass puede ayudarte a proteger tu negocio del ransomware y otros ciberataques? Conoce sus funcionalidades y contáctanos para recibir asesoría sin compromiso.